«Así que les pedí que sonrieran»: 10 retratos de desconocidos que muestran el poder de la sonrisa (Nuevas fotos)
En 2013, el viajero y fotógrafo australiano Jay Weinstein conoció una sonrisa que lo cambió todo. Mientras deambulaba por las calles de Bikaner (India), Jay vio a un hombre apoyado en una fila de motos. El fotógrafo se sintió inmediatamente atraído por el desconocido, pero pensó que era mejor evitarlo. "¡Toma mi foto también!", le gritó el hombre a Jay, que estaba fotografiando objetos cercanos, y éste le respondió con un simple "¡Sonríe!".
Este encuentro dio comienzo a una misión de casi una década de capturar a desconocidos en las calles del mundo, antes y después de que sonrían. El simple acto, a veces genuino, otras veces forzado, tiene el poder transformador de iluminar el rostro y aparentemente abrir el alma por dentro.
Así que echemos un vistazo a los cautivadores retratos de Jay de su serie en curso "así que les pedí que sonrieran" que, según el autor, documenta el lado más universal de la sonrisa: el que "supera la religión, la etnia, la clase, el género y el idioma".
Cuando acabes, echa un vistazo a nuestro artículo anterior con personas sonrientes aquí.
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Estaba de pie una mañana, ante la puerta abierta de una casa en un antiguo barrio de Hutong, cerca de la ciudad prohibida de Pekín, China... Así que le pedí que sonriera
Estaba de pie en su puesto, frente a la estación de tren una tarde, mientras toda la ciudad de Thiruvananthapuram hacía una huelga de tres días en Kerela, India... Así que le pedí que sonriera
Caminaba por una calle repleta de cafés y bares, mientras el sol se ponía en el colorido Fitzroy, en Melbourne, Australia... Así que le pedí que sonriera
Anteriormente, Jay Weinstein, el autor de este cautivador proyecto, dijo a Bored Panda que lo que realmente le gusta de este proyecto es que "me obliga a enfrentarme a mis miedos y a acercarme a gente que no conozco".
"Me obliga a desafiar las ideas preconcebidas que tengo de ellos y a aprender una y otra vez lo inexactas que son mis suposiciones. Sobre todo, en este momento de división, 'así que les pedí que sonrieran' se erige como un recordatorio profundo y cariñoso de lo mucho que todos tenemos realmente en común".
Increíblemente, al contemplar juntas las fotografías de extraños antes y después de sonreír, el espectador siente lo mismo. La imagen anterior a la sonrisa crea una especie de anticipación de cómo nos imaginamos a la persona, que a menudo se rompe en el momento en que nuestros ojos se posan en la segunda imagen en la que la misma persona sonríe.
Ella estaba con un grupo de bailarines, tomando un descanso de la grabación de un video musical del coro de la iglesia en el helipuerto del centro internacional de convenciones Kenyatta, mientras el sol se ponía sobre Nairobi, Kenia... Así que le pedí que sonriera
Una tarde ella estaba jugando con una amiga fuera de la casa familiar en el pueblo de Turtuk, Ladakh, India... Así que le pedí que sonriera
Ella estaba con su familia, fuera de su sencilla casa en el pueblo de Gaudium, una tarde lluviosa en Bengala occidental, India... Así que le pedí que sonriera
Jay, que pasó la mayor parte de su vida y la mayoría de los años en la India, comenzó su serie fotográfica "así que les pedí que sonrieran" en 2013 y nunca ha dejado de hacerlo. Aunque la mayoría de sus imágenes proceden de la India, el proyecto también ha viajado a China, Singapur, Australia, Kenia y Nepal. El fotógrafo espera llevar el proyecto y hacer sonreír a la gente en todos los países del planeta. "Vamos a ver cómo son mi tiempo, mis finanzas y el mundo posterior a COVID-19", nos dijo anteriormente.
Cuando no está fotografiando a bellos desconocidos en las calles, Jay dirige viajes en grupos pequeños en los que ofrece una nueva perspectiva de la India que desafía las mayores ideas erróneas sobre el país.
"Pregunto a los participantes cuál era su mayor idea errónea sobre la India, antes de salir de casa. La respuesta más común es: 'Me preocupaba sentirme inseguro'. Los participantes se asombran no sólo de lo equivocados que estaban, sino de lo conectados que se sentían", escribe el autor en su blog "A Wanderer's Eye".
Una mañana él caminaba por una calle con un grupo de peregrinos, mientras yo recorría la antigua ciudad de peregrinación de Dwarka, en Gujarat, India... Así que le pedí que sonriera
Una tarde él estaba esperando a que el semáforo se pusiera en verde, mientras yo atravesaba un concurrido cruce de tráfico en Koramangala, Bengaluru, Karnataka... Así que le pedí que sonriera
Él estaba sentado fuera de una tienda una tarde mientras exploraba las vibrantes y coloridas tiendas y casas de las afueras de Nairobi, Kenia... Así que le pedí que sonriera
Él estaba en su tienda poco iluminada mientras el cielo se hacía de noche en el pueblo de Tharangambadi, mientras esperábamos un autobús en Tamil Nadu, India... Así que le pedí que sonriera
