Este grupo denuncia los ejemplos más burdos de personas que quisieron desmarcarse de «la norma» pero acabaron avergonzándose a sí mismas (nuevas fotos)

A pesar de lo espeluznantes que son estas publicaciones, no puedo evitar sentir un poco de pena por las chicas que creen que necesitan distanciarse de otras mujeres. Yo también crecí viendo innumerables películas y programas de televisión escritos por hombres que presentaban a las mujeres como símbolos sexuales unidimensionales y tontos. En la escuela secundaria, pensaba que era especial por practicar deportes y conocer todas las canciones de los Beatles. (No, no estoy orgullosa de ello).

Pero esta necesidad de sentirme única no surgió orgánicamente de mí. La idea de que la mayoría de las chicas no son multidimensionales proviene de la misoginia interiorizada. Los medios de comunicación promueven la idea de que gustar de cosas tradicionalmente femeninas, como hacerse las uñas o maquillarse, hace a las mujeres menos interesantes, insulsas y poco inteligentes. Y que disfrutar de temas más masculinos, como los deportes, hace que las mujeres sean más atractivas. Estas ideas son problemáticas por varias razones, pero empecemos por el hecho de que no hay nada malo en ser femenina.  

Al contrario de lo que los medios de comunicación pueden hacerte creer, la feminidad puede ser totalmente genial. Históricamente, la palabra "femenino" ha tenido una connotación negativa. A menudo se asocia a la debilidad y aparece junto a adjetivos como delicada, bonito, suave, gentil y modesto. Aunque no todos estos calificativos son negativos, tienden a encasillar la feminidad y, desde luego, no son rasgos que den poder. Por el contrario, algunos sinónimos de la palabra masculino son valiente, fuerte y musculoso. Ah, y no olvidemos que débil aparece como antónimo de masculino.

Estas definiciones sexistas perjudican tanto a los hombres como a las mujeres. Mientras que la feminidad se utiliza para promover la idea de que las mujeres son débiles, también se utiliza como un grave insulto para los hombres. Que te llamen "femenino" o que hagas algo "como una chica" se consideran desde hace tiempo insultos para los hombres. Que se burlen de uno es una cosa, pero ¿que lo comparen con una mujer? Hay pocos insultos mayores para un frágil ego masculino, y no se me ocurre un ejemplo más flagrante de que los hombres consideran a las mujeres como inferiores.

Otro problema con la idea de "no ser como otras chicas" es que ignora por completo el hecho de que los seres humanos son complejos. La gente es capaz de pintarse las uñas y ser un atleta y ser un erudito y usar maquillaje y disfrutar de la cocina, todo al mismo tiempo, independientemente de su género. Es una creencia tan anticuada ignorar el hecho de que la masculinidad y la feminidad pueden existir en armonía. Tomemos como ejemplo el símbolo taoísta del Yinyang, que "representa las dos fuerzas de equilibrio opuestas y complementarias" que viven en todos nosotros. Cada persona puede canalizar la masculinidad y la feminidad en diferentes momentos, sin estigmatizar a ninguna de ellas.