A los profesores no se les reconoce lo suficiente el duro trabajo que realizan. Las largas horas que pasan revisando los deberes, el enorme esfuerzo que dedican a guiar y apoyar a sus alumnos, las innumerables reuniones con la Asociación de Padres de Alumnos... todo es muy duro. Pero todo tiene su lado positivo. No sólo estás formando a las generaciones futuras, sino que a veces te encuentras con un espectáculo improvisado de humor.
Hoy te presentamos algunas de las historias más divertidas de varios hilos virales en Internet, en los que los profesores revelan las cosas más graciosas que han oído decir a sus alumnos. Tanto si trabajas en el mundo de la educación como si no, seguro que te gustarán. Sigue leyendo para reírte a carcajadas.
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Un año tuve un conflicto administrativo y no me concedieron permiso para cruzar las fronteras del estado para asistir a un concurso de bandas con mis alumnos (los viajes fuera del estado requieren la aprobación de la junta). Me vi obligado a decir a mis alumnos que no podíamos asistir al concurso porque el viaje no estaba aprobado. Un estudiante de Honduras levantó la mano. Cuando le pregunté, el chico dijo: «Oye, se me da muy bien cruzar fronteras sin ser detectado. Lo puedo solucionar». Tuve que salir de la clase de lo mucho que me reía. Sigue siendo lo más gracioso que me ha dicho un alumno.
Coincidí con un estudiante por primera vez y, al empezar a conocerle, le pregunté por sus futuros objetivos profesionales y qué quería ser de mayor. Me contestó: «jubilado».
Desde hace tres años tengo una estudiante que dedica una parte de su resumen semanal a comentar mi estado mental y emocional. «El Sr. S parece notablemente estable teniendo en cuenta el tormento al que le han sometido los alumnos de primer año. Le vigilaré de cerca la semana que viene por si se anticipa un colapso».
Tuve un estudiante que no dijo casi nada durante tres años. En su último año entró en el equipo de oratoria, del que yo era preparador en aquel momento. Se presentó al concurso con un discurso titulado «por qué Dora la Exploradora es una amenaza para América». Gritamos a carcajadas.
Una vez tuve una tos muy fuerte. Era una tos muy temblorosa, con eco y traqueteante. Estábamos haciendo un examen, tosí y un niño me gritó: «Suenas como el Toyota de 1999 de mi madre intentando arrancar por la mañana».
Intenté echarle la bronca por hablar durante el examen pero, sinceramente, empecé a reírme, lo que me hizo toser, lo que hizo reír a la gente, lo que me hizo toser...
Unos estudiantes de secundaria se estaban insultando y uno le dijo al otro «te pareces a Martin Luther King si nunca hubiera tenido un sueño».
Agaché la cabeza de la risa ante la clase por culpa de aquello....
Di clases de educación cívica durante mi año de prácticas.
El primer día, mi mentor les dice a los niños de la clase que van a aprender sobre sus derechos. Un niño levantó la mano y preguntó si también aprenderíamos sobre nuestros izquierdos. Perfectamente inexpresivo. Casi me parto.
Cuando era profesor ayudante de secundaria, les explicaba a los estudiantes que algunos elementos son inestables y sólo aparecen durante un tiempo muy breve.
Un alumno dijo literalmente: «Igual que mi padre» (él y su amigo se reían a carcajadas). Dí gracias por llevar la mascarilla puesta, porque me costaba hasta la última fibra de mi cuerpo no reírme.
1) Una clase sobre Mozart, contándoles que nunca terminó su última obra, sino que la terminó su alumno Franz Xaver Süßmayr. Les cuento que Süßmayr fue al mismo colegio que yo, « oh, Dios mío, ¿estuviste en la misma clase que él?».
2) Clase sobre el rock clásico de los años 50 y 60, hablando de cómo la guitarra eléctrica es uno de los elementos más discernibles para ese género, un estudiante pregunta si realmente tenían guitarras eléctricas en los años 50, otro dice « alex por dios, si tenían bombas atómicas en la segunda guerra mundial también tenían guitarras eléctricas».
Un estudiante de primer grado miró a su amigo y se quedó boquiabierto. «¡No puede ser! Llevamos la misma camiseta!».
...Llevan uniforme. Todos los días. Esto fue en febrero.
Alguien se tiró un pedo en clase y olía FATAL. Dije: «Alguien tiene que ir al baño».
Al instante, uno de mis alumnos de 4º dijo: «Alguien tiene que ir al médico».
No pude respirar durante 10 minutos y la clase terminó. Se me fue la olla y no me importó.
Profesor de educación especial:
Caminaba por el pasillo y un niño me miró inexpresivo y dijo...
«¿Cómo es que Pac Man se come todos esos puntos blancos pero nunca se para a hacer caca?».
Un estudiante me dio un bolígrafo y un papel en blanco. Me dijo que era una tarjeta de cumpleaños «hazlo tú mismo».
Haciendo un problema matemático que involucraba a alguien yendo en bicicleta unos 6 kilómetros hasta la playa:
«Eso es chungo; toma un Uber...».
Uno de mis chicos dijo una vez «Profe. Me golpeé la cabeza en gimnasia. Creo que tengo una conclusión»
«Sí que la tienes. Ve a la enfermería».
en inglés tiene más gracia, se dice concussion (conmoción cerebral). en castellano existe esta palabra pero tiene otro significado.
(En el supermercado después de las clases) Un alumno de 6º grado, con su familia: "¿Qué haces aquí? ¿Se olvidaron de apagarte y meterte en el armario hasta mañana?" Me partí de risa.
Uno de mis peores alumnos:
«Estoy estornudando demasiado, seguro que tengo alergia a algo aquí»
Compañero de clase:
«¿A qué, a trabajar?»
Un niño de preescolar: No quiero ser presidente porque quiero conservar mis dientes
(Estaban aprendiendo sobre George Washington y se enteraron de que tenía dientes postizos. Este niño supuso entonces que para ser presidente había que perder todos los dientes y tener dientes postizos).
Puedes seguir leyendo esta otra lista sobre profesores compartiendo las increíbles excusas de estudiantes por llegar tarde que resultaron ser 100% ciertas.