12 Personas exponen a sus jefes horribles al compartir capturas de pantalla de sus mensajes

Si bien no es necesario ser el mejor amigo de tu jefe, es razonable querer llevarse lo mejor posible para que el ambiente laboral, en el que uno debe quedarse todos los días de 9 a 5, sea saludable. Pero, tristemente, esto no siempre ocurre así. Una encuesta reciente del sitio web de empleos Monster.com sondeó a casi 1000 personas que buscaban trabajo, y halló algunas cosas impactantes.

De hecho, cuando se les preguntó por qué querían dejar a su empleador actual, un 76% de los entrevistados nombraron a un jefe “tóxico” como la razón. Por supuesto, podemos debatir mucho lo que el término “tóxico” significa exactamente, ya que puede referirse a alguien idiota hasta de una persona muy demandante, que controla cada detalle, que da órdenes a los gritos, que critica constantemente a los trabajadores o que se comporta de forma inadecuada.

Una cosa está clara: un jefe tóxico es alguien que envenena el ambiente laboral con su toxicidad, en lugar de usar su poder para motivar, inspirar y comprender a los empleados. Por otro lado, un 26% de los empleados de la encuesta de Monster dijo que su jefe estaba “hambriento de poder”, o que solo se preocupaba por sí mismo. Un 18% llamó a su jefe “controlador”, y un 17% dijo que su jefe era “incompetente”. Otro 15% comentó que su jefe nunca estaba disponible y que parecía no importarle nada.

Otra encuesta, en la que se entrevistó a 2000 trabajadores de oficina estadounidenses, mostró que estos preferirían recibir más comentarios de sus gerentes que más dinero. De hecho, un 53% de los encuestados dijo que la retroalimentación es lo que más desearían obtener de sus jefes. Sorprendentemente, esto resultó ser más importante que la compensación extra (48%) y que la comunicación más honesta (48%).

Además, un 78% de los encuestados que tuvieron un empleo antes (siete de cada diez), habían admirado a alguno de sus gerentes como un ejemplo a seguir. Los resultados sugieren que los buenos gerentes, directores ejecutivos y jefes no son tenidos en cuenta a la hora de medir el éxito de una compañía, aun cuando juegan un rol vital en mantener el buen desempeño de los empleados.

Increíblemente, un jefe admirable puede tener tanta influencia positiva a largo plazo en los empleados que llega a afectar directamente sus acciones. La encuesta halló que un 71% de los encuestados dijo que sus modelos a seguir impactaban directamente su comportamiento y sus elecciones día a día.