Hay muchas cosas que conforman nuestra forma de vida. En esa lista, los miembros de la familia son posiblemente los que más importan. Pero no se trata sólo de los padres; los hermanos son igualmente importantes, e incluso la línea de sucesión puede ser influyente. El primogénito y el tercer hijo, por ejemplo, suelen vivir experiencias completamente distintas, a pesar de crecer en la misma familia.
Ser el primogénito suele conllevar bastantes responsabilidades. Suelen ser la mano derecha de los padres en casi todo, convirtiéndose en la columna vertebral de la familia. Así lo atestiguan numerosos primogénitos, y sus tuits lo demuestran mejor que ninguna otra cosa. Es hora de escuchar las voces de las hijas mayores, y hoy, eso es exactamente lo que estamos haciendo. Hemos encontrado sus mensajes de Twitter que mejor describen todo lo que implica ser la mayor de los hijos y una hija. Desplázate hacia abajo para encontrarlas y familiarizarte con lo que significa ser la abanderada de tus hermanos.
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Tener hermanos puede ser una bendición y una maldición a la vez. A veces, no hay nadie más molesto que tu hermana pequeña lloriqueando por algún juguete que no le han regalado, o tu hermano siendo el típico niño obstinado Por otro lado, nadie es tan buen cómplice para hacer travesuras o para ofrecerte un hombro sobre el que llorar cuando lo necesitas.
A menudo, ninguna otra persona en el mundo puede entenderte como lo hace tu hermano. No sólo han pasado tanto tiempo juntos que pueden terminar las frases del otro, sino que también han pasado por los mismos acontecimientos en el hogar, tanto los buenos como los malos.
Por eso el amor incondicional une a la mayoría de los hermanos; pero uno de ellos destaca por ser especialmente protector. Y ése es el mayor. Suelen ayudar a los padres a cuidar del bebé básicamente desde el momento en que nace el hermano pequeño, con lo que se convierten en una figura de salvaguardia en la vida del pequeño.
No es de extrañar que, más adelante, las mamás y los papás se suban rápidamente al tren de utilizarlos como servicio de niñera, por frustrante que resulte a veces. "¿Quieres reunirte con tus amigos en el centro comercial? Llévate a tu hermana", "¿Vas a pasar tiempo fuera? Sólo puedes hacerlo si también va tu hermano"; cualquiera que tenga un hermano pequeño conoce el procedimiento.
Estas imágenes reflejan lo que supone no sólo ser la mayor de los hijos, sino también una hermana, a la que hay que querer a toda costa. Según Reader's Digest, las hermanas pueden evitar que sus hermanos experimenten fuertes emociones negativas, como sentirse culpables, no queridos, solos, cohibidos y temerosos, y ése es el tipo de apoyo que todos necesitamos en la vida.
Soy hija mayor, hermana de dos chicos y la verdad que pusieron mucha responsabilidad sobre mí y,aunque era normal porque mi madre tenía que trabajar, hay cosas que mirando atrás no me correspondían para nada. Ahora tengo dos hijas y creo que tengo una especie de trauma porque intento no pedir ayuda para nada a la mayor, me cuesta hasta pedir que me traiga un pañal, jejejeje. No quiero caer en los mismos errores.
Pues yo no lo veo para tanto. En mi caso no soy la mayor, soy la 2a pero de 11 hermanos y la verdad es que lo he vivido con mucha naturalidad. Casi salía de mí llevarme a mis hermanos al parque. Es cierto que se ha tendido a pedir ayuda más a las hijas que a los hijos en cuanto a las labores de casa, pero al final, todos teníamos nuestra área de responsabilidad. Y me encanta.
Soy hija mayor, hermana de dos chicos y la verdad que pusieron mucha responsabilidad sobre mí y,aunque era normal porque mi madre tenía que trabajar, hay cosas que mirando atrás no me correspondían para nada. Ahora tengo dos hijas y creo que tengo una especie de trauma porque intento no pedir ayuda para nada a la mayor, me cuesta hasta pedir que me traiga un pañal, jejejeje. No quiero caer en los mismos errores.
Pues yo no lo veo para tanto. En mi caso no soy la mayor, soy la 2a pero de 11 hermanos y la verdad es que lo he vivido con mucha naturalidad. Casi salía de mí llevarme a mis hermanos al parque. Es cierto que se ha tendido a pedir ayuda más a las hijas que a los hijos en cuanto a las labores de casa, pero al final, todos teníamos nuestra área de responsabilidad. Y me encanta.