40 Personas que pillaron a sus gatos durmiendo juntos en extrañas posturas y tuvieron que compartirlo
Hasta el momento sabemos que los gatos duermen en parras, pinos, cerezos, cajas de pañuelos, lavabos, copas, botas de invierno, terrarios, macetas y tendales... dejémoslo ahí por el momento. Si no te suena, echa una ojeada a nuestras anteriores recopilaciones de gatos dormidos.
Pero cuando creíamos que ya eramos expertos en este departamento, surgieron las fotos de gatos durmiendo juntos, en las más extrañas posturas, como si fueran figuras de globitos pero peludas..
"Si retorciéramos el cuerpo como ellos, estaríamos incómodos o doloridos, así que no podemos dormir en tales posturas," explica Celia Haddon, experta en comportamiento de gatos. Debajo puedes leer la entrevista y votar por tus fotos favoritas.
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Estaba leyendo en la cama anoche cuando me di cuenta de que mi marido y los gatitos de acogida se habían quedado dormidos así.
"Los gatos mantienen a sus amigos cerca y a sus enemigos a distancia. Es natural en ellos distanciarse socialmente de desconocidos. En los hogares también, porque son "conocidos", no amigos. Los gatos que no se caen bien, nunca se dormirán tocándose."
Trudi Atkinson dice que los gatos que son parte del mismo grupo social, a menudo duermen acurrucados juntos. "No todos los gatos que viven juntos se consideran en el mismo grupo social que sus compañeros."
"La columna vertebral de los gatos rota más que las nuestras, y tienen discos almohadillados entre las vértebras. Su clavícula no está unida a los hombros, sino que estos están unidos al cuerpo con músculos y no huesos." Esto explica su flexibilidad.
"Si hace frío, los gatos amigos probablemente duerman con más amigos y con contacto. Nosotros nos sentiríamos incómodos y doloridos si intentáramos dormir así."
Con la edad, tienen más cuidado con donde duermen, porque a veces tienen artritis y necesitan más comodidad.
"A los gatos les gusta dormir con sus humanos porque damos calor, somos como mantas eléctricas para ellos". Además, sus instintos les avisan para que no les aplastemos dormidos, y sus ronroneos nos ayudan a relajarnos.
Me los encuentro así casi todos los días
