Montañas líquidas: Fotografié el lago Erie el día que mostró su verdadero poder

Me llamo Dave Sanford y soy fotógrafo profesional desde hace 18 años. Mi mayor pasión es lo que tenga que ver con el agua, me atraen lagos y océanos. Me fascina su fuerza y su poder, el hermoso movimiento de las olas y la luz hipnótica bailando sobre ellas.

Recientemente he visitado los Grandes Lagos, cerca de mi hogar en Ontario, Canadá. El que más me llamó la atención fue el lago Erie. En estos días oscuros, fríos y ventosos de otoño, los lagos se vuelven una masa de agua salvaje y traicionera.

La naturaleza impredecible y violenta del lago Erie ha llevado a afirmar que se han producido entre 1800 y 8000 naufragios en sus aguas desde el siglo XVII, muchos de los cuales no han podido ser encontrados.

Durante 4 semanas, durante 2 ó 3 días, 6 horas diarias, iba a la costa Norte del lago Erie con mi cámara Canon y mis objetivos de 400 mm y 70-200 mm. La temperatura variaba entre -2º y 14º celsius, había fuertes vientos y las olas alcanzaban casi 8 metros de altura. En días como estos, la gente normal se aleja del lago, porque se vuelve vivo y muestra su verdadero poder. En días como ese es cuando no puedo esperar a llegar al lago ¡y fotografiarlo!

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