La gente comparte fotos de la vida hace 100 años y podrían poner las cosas en una nueva perspectiva (nuevas fotos)

Para algunos, el valor nostálgico de una foto histórica reside puramente en las cualidades visuales y estéticas de la imagen. Esto también puede explicar por qué las redes sociales pusieron de moda el uso de un filtro retro (¡gracias Instagram!). Según un estudio, el 63% de los encuestados afirma preferir las fotos de estilo vintage a las modernas.

Y sin embargo, piensa en una foto de tus abuelos el día de su boda o en una brumosa fotografía de tu ciudad natal antes de que se llenara de oficinas de varios pisos y Starbucks. ¿Sientes esa calidez y esa emoción? Pues bien, ése es el otro tipo de nostalgia que funciona gracias a nuestros recuerdos personales y asociaciones culturales, algo que películas como Aftersun, ganadora del Oscar el año pasado, consiguen captar con todos sus colores.

Aunque parezca mentira, hubo un tiempo en que la nostalgia y el acto de hojear los álbumes de recortes se veían con malos ojos. Los médicos de los siglos XVII y XVIII la consideraban una enfermedad neurológica, y a veces incluso la utilizaban como excusa para licenciar a los soldados del campo de batalla.

Obviamente, la opinión predominante sobre esta emoción agridulce ha cambiado con los años. Según un estudio de investigación, la nostalgia genera sentimientos positivos, mejora la autoestima e incluso refuerza nuestros vínculos con los demás.