Manejar una empresa es una tarea delicada. No importa qué tan grande se vuelva, siempre existirán muchas oportunidades para arruinarlo todo.
Para demostrar que ninguna organización está libre de cometer errores, Hannah Baked, una usuaria de TikTok, creó videos sobre los errores y desastres que las más grandes marcas han cometido y que terminaron volviéndose noticia. Estoy seguro de que estas empresas les pidieron al departamento de relaciones públicas que taparan sus equivocaciones, pero ni siquiera ellos pudieron ocultarlas del todo.
¿Habían oído que Pringles (accidentalmente) puso laxantes en uno de sus sabores? ¿O que Lipton lanzó una campaña que, sin quererlo, le dio a la gente una provisión infinita de té?
Continúen leyendo para ver todos los hallazgos de los que habló Hannah y, si les gustaría leer sobre el humor de las empresas, échenle un vistazo a nuestra publicación sobre humor corporativo.
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En 2017, en un vuelo de United Airlines, un pasajero fue arrastrado por el pasillo. La razón fue que el vuelo había sido sobrevendido y, como nadie se había ofrecido a irse, seleccionaron a alguien al azar para que dejara su asiento. El pasajero se negó a irse y llamaron a seguridad, quienes tomaron al hombre a la fuerza y lo arrastraron fuera del avión. Esto dejó disgustados al resto de los pasajeros y decidieron tuitear sobre el incidente, lo que hizo que United Airlines tuviera que disculparse públicamente y compensar al pasajero.
La marca de té Lipton hizo una oferta de “paga uno, lleva otro gratis”. El problema es que todas las cajas tenían un cupón para canjear por una caja de té de regalo, lo cual creó una situación en la que los clientes podían obtener una provisión infinita de té gratis.
En 2016, Samsung tuvo que detener las ventas del teléfono Galaxy Note 7 luego de que los clientes denunciaran que sus teléfonos se sobrecalentaban y se prendían fuego. La respuesta de Samsung fue enviar cajas ignífugas de muchas capas con instrucciones de embalaje.
Victoria’s Secret publicó una foto en su cuenta de Instagram en la que a la modelo le faltaba un brazo. Cuando los seguidores comenzaron a criticarlos por haber utilizado Photoshop, rápidamente borraron la publicación.
Pringles creó una versión sin grasas de sus patatas fritas, y fue exitosa hasta que los clientes reportaron calambres estomacales. Ello se debía a que el ingrediente que usaron para sustituir las grasas, en realidad, tenía un efecto laxante.
Domino’s fue criticada luego de que sus empleados filmaran y publicaran una serie de videos en los que se metían queso por la nariz y se limpiaban el cuerpo con uno de los trapos destinados a la limpieza del lugar. Luego de que fueran publicados en YouTube, millones de personas los vieron, lo que hizo que el director ejecutivo también los hallara. Los empleados fueron despedidos y se los demandó por haber contaminado los alimentos.
En 2020, Singapore Airlines lanzó una campaña llamada “Flight To Nowhere” (o “Vuelo a ninguna parte”). Planeaban hacer vuelos de tres horas en los que los pasajeros podían comer mientras volaban y disfrutaban de la vista. Esto recibió muchas críticas de parte de ecologistas, ya que los vuelos no tenían el propósito de viajar a ningún lado. Singapore Airlines respondió al modificar la campaña para que pasara a tratarse de una cena en un avión estacionado en una pista.
En 2013, se realizaron pruebas aleatorias en las albóndigas suecas de IKEA y se hallaron rastros de carne de caballo. IKEA fue informada sobre ello y se decidió retirarlas de la venta. El escándalo de la carne de caballo tuvo mucha repercusión, ya que muchos clientes dudaron sobre comer en IKEA luego de ello.
No acabo de entender que haya tanta gente que considera aceptable matar cerdos y vacas para comer pero les escandaliza hacer lo mismo con un caballo
Dolce and Gabbana publicó tres videos cortos en sus redes sociales para promocionar un desfile de modas que harían en Shanghái. Los videos mostraban a una mujer china que trataba de comer platos italianos utilizando palillos mientras una voz en off intentaba enseñarle a comer. Recibieron muchas críticas en las que se los acusaba de racismo y borraron el video luego de 24 horas. Pero el drama no terminó allí, ya que Stefano Gabbana fue expuesto por haber dicho que China era un país de: “Cinco emojis de caca”. Gabbana dijo que su cuenta había sido hackeada, pero, en ambos casos, tuvieron que disculparse públicamente.
Domino’s creó una campaña que decía: “Llamando a todas las Karen amables”. Esta campaña les permitía obtener una pizza gratis a las mujeres llamadas Karen, siempre que fueran clientes amables. El problema fue que esta campaña recibió muchas quejas y tuvo que ser cancelada.
En 2017, Kendall y Kylie intentaron vender camisetas que mostraban a raperos fallecidos y a Ozzy Osbourne. En Twitter, recibieron comentarios negativos por ser irrespetuosas e intentar ganar dinero usando estos íconos. Las camisetas fueron sacadas de la venta y Kendall Jenner respondió diciendo que los diseños no fueron bien pensados y que se disculpaba.
Gucci causó una controversia luego de haber diseñado un suéter que fue criticado por parecer que hacía blackface. La prenda fue vendida al público por $890 y formaba parte de la colección otoño/invierno. Gucci reaccionó sacando el suéter de la colección y pidiendo disculpas, al decir que “estaban comprometidos con alentar la diversidad”.
En 2013, la cuenta de Twitter de Burger King fue hackeada. El hacker decidió cambiar el logo de Burger King por el de McDonald’s. Además, tuiteó insultos racistas y mentiras sobre la empresa. Uno de los tuits decía que Burger King había sido comprado por McDonald’s. Otro tuit decía: “Si te encuentro en Wendy's, ¡te golpearé!”. Burger King reaccionó al pedirle a Twitter que suspendiera la cuenta y al pedir disculpas públicamente en su página de Facebook.
En 2005, Frito-Lay creó un bálsamo labial con aroma a Cheetos. El problema que ocurrió con este bálsamo es que casi nadie lo compró.
P & G recibió muchas reacciones negativas por su publicidad para el día de la madre, que mostraba a una mujer limpiando y cuyo eslogan decía: “En este día de la madre, enfócate en el trabajo que verdaderamente importa”.
Bacardi recibió muchas críticas por su eslogan que decía: “¿Quieres verte mejor este verano? Entonces, consigue el accesorio más popular actualmente: ¡una novia fea!”.
La compañía de hipotecas better.com organizó una reunión en Zoom junto a 900 de sus empleados. El director ejecutivo anunció que esos 900 empleados serían despedidos y dijo que, si alguien se encontraba en esa llamada, era porque formaba parte del infortunado grupo que tendría que dejar su trabajo. Se publicó un video de la reunión en línea y, en él, podía verse a los empleados llorando y sorprendidos por el anuncio. El director recibió tantas críticas que tuvo que tomarse un tiempo libre para reflexionar sobre lo ocurrido.
En 2019, Burberry estuvo en medio de una controversia luego de que, en su desfile de moda, se presentara una sudadera con una horca en la capucha. La modelo que lo usó cuando desfiló criticó a la marca en las redes sociales, al decir: “[Quitarse la vida] no es una moda”. Luego de recibir muchas críticas en línea, la empresa respondió escribiendo una disculpa pública en la que admitieron que la prenda había sido insensible.
Dolce and Gabbana recibió muchos comentarios negativos luego de haber creado unos zapatos que decían: “La delgadez es hermosa”. Esto enfureció a muchos fanáticos, quienes tuitearon que ese no era un mensaje responsable y que no apoyaba la inclusividad de la diversidad corporal. La marca no mostró remordimientos, ya que respondió: “La próxima vez, escribiremos ‘nos encanta estar gordos y llenos de colesterol’”.
"Que se puede esperar de un burro mas que una patada"... Ese tipo de marcas no son ejemplos de nada! y nadie deberia esperar algo de ellas. Lo digo porque en publicidad me tocó analizar algunas de sus publicidades y muchas son nefastas.
TRESemmé recibió duras críticas luego de hacer una publicidad en la que se mostraba diferentes tipos de cabello de personas de color, con títulos en la parte inferior que decían: "cabello con frizz y sin brillo" y "cabello seco y dañado". En cambio, las dos fotografías del cabello rubio decían: "cabello normal" y "cabello lacio y fino". La publicidad tuvo que ser removida debido a que muchas personas se indignaron y dijeron que TRESemmé había sido racista y extremadamente insensible.