20 Personas que se criaron en la pobreza explican las cosas que los niños ricos nunca entenderían
En 2020, había 37,2 millones de personas viviendo en la pobreza en Estados Unidos (aproximadamente 3,3 millones más que en 2019). Eso equivale al 11,4% de la población del país.
Brandon L., de Nueva Jersey, sabe perfectamente lo que eso significa. Él también creció en la pobreza. Y le ha afectado tanto que, incluso ahora que Brandon es un adulto responsable, sus comportamientos siguen estando en cierto modo formados por su pasado.
"Creo que mi mayor problema financiero es que crecí pobre", tuiteó. "Así que ahora que gano mi propio dinero, no sé cómo presupuestar. Siempre voy a gastar el centavo extra por la calidad porque puedo y odio la sensación de estar limitado en lo que puedo hacer en función de una etiqueta de precio."
Y no es el único. Después de que su sincera confesión se hiciera viral, la gente empezó a relacionarse con ella compartiendo algunas de sus propias luchas personales, unas que probablemente no estarían ahí si tan solo hubieran tenido más cuando eran pequeños.
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Cierto. Pasé por periodos donde lo único que podía permitirme comer era pizza congelada y arroz cocido. Ahora que todo marcha bien en mi vida no me gusta que la nevera se vea vacía. Y termino llenándola sólo porque me da pánico verla vacía otra vez.
Las luchas que vemos en estos tuits también han llamado la atención de los investigadores. De hecho, según un amplio y creciente conjunto de artículos científicos, los niños pobres crecen con una serie de problemas físicos cuando son adultos.
Pero eso no es todo. Un amplio estudio reciente, realizado mediante el seguimiento de los participantes durante un periodo de 15 años, descubrió que la pobreza infantil también puede causar importantes daños psicológicos en la edad adulta.
El estudio concluye que los niños pobres tienen una conducta más antisocial, como la agresión y el acoso, y un mayor sentimiento de impotencia, que los niños con ingresos medios. Los niños pobres también tienen más estrés fisiológico crónico y más déficits de memoria espacial a corto plazo.
