Cuando llamamos a un país u otro nuestro hogar, en realidad, vivimos en una burbuja cerrada en la que las cosas que comemos, las formas de comunicarnos y las cosas que llamamos normales son sólo naturales mientras no salgamos de ellas. Pero basta con unas simples vacaciones en el extranjero, y con cambiar de país, para ver que tus puntos de vista y costumbres empiezan a cambiar.
Así que un redditor se dirigió a los estadounidenses que viven en el extranjero y les hizo una pregunta aparentemente sencilla, pero muy reveladora: "¿cómo ha cambiado tu visión del mundo desde que te mudaste de Estados Unidos?”.
Antes de que nos diéramos cuenta, las respuestas llegaron a raudales con expatriados que compartían cosas que habían experimentado en lugares extranjeros. Resulta que algunas de estas experiencias han cambiado la forma en que los estadounidenses ven su país de origen desde su misma esencia.
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Me mudé al Reino Unido hace 4 años y medio. Tenía la ligera sospecha de que Estados Unidos no era tan bueno como nos habían hecho creer, pero ahora lo sé. La posibilidad de ir al médico cuando lo necesitas y no preocuparte por tener que pagar una factura enorme es indescriptible. El Reino Unido tiene sus problemas, sin duda, pero el mero hecho de saber que si me lesiono o enfermo el NHS (Servicio Médico Nacional) se ocupará de mí es una sensación increíble y maravillosa. ¡Gracias a todos los miembros del NHS!
Hay mucha menos presión diaria en mi país de adopción. Es difícil de explicar. Es como salir de una habitación abarrotada, iluminada y ruidosa y entrar en una noche fresca y tranquila. Mi teléfono no explota con las llamadas de teleoperadores. No vivo con el temor de que mi asistencia sanitaria desaparezca. Puedo ir al trabajo en bicicleta, donde gano un sueldo que me permite vivir de verdad. Mis fines de semana se respetan. Puedo vivir sencillamente sin tener que trabajar a como un loco. Me siento libre.
Llevo más de 20 años fuera de los Estados Unidos, principalmente en el Reino Unido, pero también he pasado algún tiempo en otros lugares.
Me he dado cuenta del lavado de cerebro que tiene el estadounidense medio. Recitar el juramento de lealtad todos los días en la escuela, grupos de oración en la escuela, permanecer en trabajos de mierda por la mierda de la asistencia sanitaria, sin días de enfermedad, sin días de vacaciones, sin permiso de maternidad, sin asistencia sanitaria universal, la locura de la deuda universitaria, la lista sigue y sigue y es una demencial. No es normal.
Viví en Japón durante un par de años y, como artista negro, recibí allí un respeto que nunca he experimentado en Texas.
Para mí, fue lo pésimo que es el transporte público y la planificación urbana en Estados Unidos.
Tenemos un transporte público pésimo y diseñamos la mayoría de nuestras ciudades de tal manera que es casi imposible desplazarse sin un coche.
Aparcamientos gigantescos, autopistas de 10 carriles, sin aceras, enormes carreteras con coches que se mueven a velocidades de autopista, infraestructura para bicicletas inexistente, zonificación que prohíbe la densidad, etc.
¿Sabías que Atlanta y Barcelona tienen poblaciones similares (en sus metros) pero Atlanta ocupa 10 veces más terreno? Así de mal está la expansión en Estados Unidos, especialmente en el Cinturón del Sol (the Sun Belt).
En mi opinión, las ciudades transitables y el buen transporte público son muy buenos para la calidad de vida.
Vivir en Holanda... la vida no tiene por qué ser tan dura. No tiene por qué ser una competición sobre quién tiene más cosas. No es necesario que los himnos nacionales suenen en los eventos deportivos. Compra calidad, no cantidad. Cuida tu vecindario, porque no hay terrenos libres en la calle. Deja que la naturaleza sea la naturaleza, no un lugar para lucir tu todoterreno. Tener patio es una tontería.
Una cosa que me llama la atención es que todo el mundo tiene una opinión sobre los Estados Unidos, a menudo visceral, tanto buenas como malas. Estaba sentado en el aeropuerto de Seúl y un hombre coreano me habló y me preguntó de dónde era. Se mostró muy agradecido a los soldados estadounidenses cuando le dije que era estadounidense. Otras veces los europeos piensan que somos realmente estúpidos por nuestra falta de protección de los trabajadores y de asistencia sanitaria universal (y son muy conscientes de cosas como nuestra mayor tasa de mortalidad materna, que la mayoría de los estadounidenses desconocen).
Creo que eso cambió mi visión del mundo: Estados Unidos está metido en los asuntos de todo el mundo. Nuestro poder suave, con cosas como películas, canciones y videojuegos y productos como Coca-Cola y Starbucks, penetra en todo el mundo. Lo contrario no sucede: muchas cosas que son casi universales no llegan a Estados Unidos.
Dejando de lado el tema estadounidense, me di cuenta de que la mayoría de la gente quiere las mismas cosas en la vida y la mayoría de la gente de cualquier país sólo quiere llevarse bien. Son el gobierno y la élite los que tratan de enfrentar a los grupos de personas entre sí. Considero que China y Rusia son enemigos declarados de Estados Unidos, pero soy amigo de gente de esos países y son buenas personas, que intentan vivir su vida, criar a sus hijos y divertirse un poco.
Además, todo el mundo es racista. En EE.UU., lo mostramos en público y hay un esfuerzo real por solucionarlo. Eso no siempre ocurre en otros países: algunos se contentan perfectamente con seguir siendo parciales contra otras razas.
Me he dado cuenta de que la gente de Estados Unidos no sabe nada de otros países y no les importa. (La madre de mi hijo me ha preguntado si tenía cañerías interiores).
He estado viviendo en mi nuevo hogar durante unos 20 años y durante los últimos años, quiero arrodillarme y besar el suelo aquí y ser tan feliz de que NO estoy todavía viviendo en los EE.UU.. Todavía tengo familia allí, pero ni siquiera quiero ir de visita.
La delincuencia. Pasé de vivir en D.C. en plena epidemia de crack en los 80, donde se inventaron los robos de coches, a Alemania, donde ni siquiera podías cerrar tu Mercedes por dentro.
Estoy seguro de que otros lo han dicho, pero la sanidad universal es algo tan obvio cuando se vive en un país con un sistema establecido. Realmente no entiendo por qué no podemos conseguir que nuestra propia gente apoye la idea.
Llevo 17 años viviendo en Inglaterra, originaria de la costa este de los Estados Unidos.
No tengo ningún problema en pasear por la noche en mi pueblo o en la mayoría de las ciudades de Inglaterra. En Estados Unidos no lo haría.
Mi visión del mundo se ha ampliado. Ahora conozco más cosas fuera de los Estados Unidos. Trabajo en una empresa global y es evidente quién no ha estado nunca fuera de Estados Unidos cuando hablas con ellos.
Todavía no sé preparar una taza de té en condiciones. Pero prefiero el té verde y el café.
El libro Watching the English me ayudó a entender un poco mejor a la gente de aquí. El libro The Culture Map me ayudó a entender un poco mejor a la gente de todo el mundo.
Ahora puedo encontrar casi cualquier comida aquí, así que ni siquiera echo de menos eso.
Tenemos el NHS (Servicio Médico Nacional), menos horas de trabajo y un mejor equilibrio entre la vida laboral y la personal.
Tanto. Por dónde empiezo. Mi visión se ha vuelto más proporcional, el mundo está interconectado y es mucho más pequeño de lo que nunca imaginé. Hay gilipoll*s en todas partes. En todas partes hay problemas. No se trata del salario sino del estilo de vida que lo acompaña. Por ejemplo, en Italia ganaba unos centavos, pero el estilo de vida era rico y relajado. El salario mínimo en Australia es fantástico y el estilo de vida es fácil. En Londres hay mucho estrés para un trabajo bien pagado, pero es muy divertido. Básicamente, lo que importa es el estilo de vida. No puedo hablar por todos los Estados Unidos, pero yo me fui porque no podía soportar la visión jerárquica de la carrera, el estrés y la trampa de las dos semanas de vacaciones al año. Lo que haces es lo que eres, al menos desde mi experiencia, y quería un cambio mental.
Llevo 3 años viviendo en México. Me he dado cuenta de que el mundo entero no gira en torno a lo que sucede en los Estados Unidos. Incluso siendo México un vecino muy cercano, puedes pasar muchos días sin tener ni idea de lo que está pasando, lo cual es increíble honestamente. Yo no voto aquí, así que tampoco me importa mucho lo que pasa con la política mexicana. Cada vez que vuelvo a casa, me doy cuenta de la gran parte del día que se pasa en los EE.UU. con miedo a hacer algo malo, romper una regla, o simplemente tener miedo. El nivel de ansiedad de la mayoría de la gente es extremadamente alto en los Estados Unidos. Aunque siempre amaré mi hogar, me doy cuenta de que cuando vivo en EE.UU., estoy constantemente con el temor de verme "forzado" a contraer grandes deudas a través de facturas médicas, un accidente, el alquiler, etc. Ni siquiera tengo seguro en México, incluso cuando he tenido que ir al hospital o ver a un especialista, es tan increíblemente asequible para una atención extremadamente buena.
Me mudé de California a Sydney, Australia, hace unos 10 años. Las obvias, como la asistencia sanitaria y el pago de un salario digno a la gente, me resultan difíciles de ver en EE.UU. Me encanta EE.UU., pero ahora sólo para visitarlo. No me gustaría criar a mis hijos allí.
Hice un máster en el Reino Unido y, hombre, mi visión de Estados Unidos realmente cambió.
Somos ruidosos. Muy ruidosos y demasiado excitados todo el tiempo por las cosas más insignificantes. Nos gusta exagerar y hacer cosas al aire libre. Si los países tuvieran una personalidad, Estados Unidos sería el extrovertido que no tiene límites y que comparte demasiado, e Inglaterra es el introvertido de labios apretados y sin sentimientos.
Pero, maldita sea, cuando estuve allí, eché de menos mi país: lo positivos, alegres y amables que somos todos. No acabé de entender el "humor" británico (lol) y me encontraron demasiado ruidoso y odioso. Sentí que tenía que moderar mi personalidad allí.
También me sentí juzgado. Fui a una sesión de tutoría de escritura y la tutora me preguntó inmediatamente "el inglés no es tu primera lengua, ¿no?". Y yo dije "qué cojon*s, estoy hablando un inglés perfecto". Y ella dijo "Oh, el inglés americano no es lo mismo que el inglés. ¡MALDITA SEA! ¡QUÉ COÑ*!
De todos modos, por mucho que me guste la cultura y la rica historia y los pasteles de Jaffa y los sándwiches de pepino durante la hora del té al otro lado del charco, Estados Unidos siempre será mi hogar.
Ahora estoy en Estados Unidos, pero viví en Japón durante unos años cuando era más joven, y eso me cambió muchas cosas. Sobre todo, me di cuenta del valor de cosas como la medicina socializada y una red de seguridad social en general. También llegué a admirar y adoptar la actitud cultural de que hacer algo "grande" es menos importante que simplemente dar lo mejor de ti en cualquier cosa que hagas -- en última instancia, me despojó de mi tendencia a clasificar mentalmente los trabajos como "respetables" y "no respetables".
Por otra parte, mi educación me enseñó a cuestionar la autoridad y a valorar la verdad y la individualidad, y muchos de los conflictos que tuve con la cultura japonesa acabaron reforzando todas esas cosas... Aunque en ese momento no me había dado cuenta de cuántos de mis compatriotas estadounidenses podían y acabarían llevando esos valores a extremos extraños y peligrosos.
He tenido la suerte de vivir en 4 continentes, y en cada lugar fuera de los Estados Unidos he sentido que mi cerebro estaba de vacaciones.
Pasé un tiempo en Italia, fui de Florencia a Roma y paré en montones de pueblecitos por el camino, la vida fuera de Estados Unidos es mucho más lenta. La gente no va corriendo de un lugar a otro para hacer las cosas. Puede que esto sea sólo para Italia, pero todo el mundo iba más despacio en comparación con los Estados Unidos.
Bueno, me mudé a Canadá hace como 3 meses y medio, mis expectativas no eran tan buenas, pero maldita sea, me equivoqué, calles limpias, gente amable, impuestos más bajos, sanidad más barata y eficaz y la policía funciona bien, pero me siento muy mal por Litton que se quemó.
Me mudé a un país importante de la UE.
EE.UU. es la tierra de la gente ruidosa, de los aparcamientos, de los anuncios y de la publicidad, de la asistencia sanitaria cara, del pensamiento retrógrado en la educación y la cultura del trabajo, de la personalidad y la cortesía falsas, de la grave falta de atención a la salud mental y de la creación de una presentación de la vida seudo feliz al mundo, de la falta de comunidad, de la falta de visión del mundo, de la falta de empatía, de la falta de comprensión cultural, visión global centrada en sí misma políticamente, la gente es generalmente más manipuladora e intenta explotar a los demás para su propio beneficio, desprecio absoluto por la protección de los recursos naturales (Agencia de Protección del Medioambiente ¡qué broma es esa!), falsa creencia de que no hay un sistema de castas y de que uno se puede mover fácilmente entre las clases económicas, policía sin educación y demasiado fanatismo religioso. Transporte público terrible incluso en las grandes ciudades con transporte público como Nueva York o San Francisco.
Pero en el lado bueno, hay mucho espacio al aire libre para la gente, buena barbacoa y otras comidas en restaurantes, cultura empresarial, bourbon y whisky, disponibilidad de bienes y recursos, tierra barata si la buscas, burocracia relajada.
Las similitudes son muchas. Ambos tienen catetos y privilegiados, gente rica que está por encima de la ley mientras tenga el color de piel o la religión adecuada en su comunidad, demasiado uso del plástico, una fuerte cultura del automóvil, interés diverso en actividades extra (seguro que aquí no hay una gran cultura de las armas, pero otras actividades la sustituyen).
Me crié en California, pero he vivido en un par de países diferentes. Diría que lo primero que noté en la primera semana de vivir fuera de Estados Unidos es que la mayoría de los extranjeros eran increíblemente hospitalarios e incluso estaban entusiasmados por compartir su cultura conmigo. A los estadounidenses no les importa el resto del mundo. Otra cosa que noté rápidamente fue que los estadounidenses son gente ruidosa.
Tuve la suerte de vivir en Japón durante casi 5 años. Si vivir allí y viajar por la región me enseñó algo es que nosotros, como estadounidenses, no sólo somos extremadamente afortunados sino también bastante ignorantes y desagradables cuando se trata de la mayoría de los temas.
Amo a los Estados Unidos y lo que representa, pero la gente que vive allí está tan podrida como la que más. El respeto a las personas y a sus cosas ya no se tiene en cuenta aquí. Otros países, incluido Japón, tienen obviamente defectos, y muy importantes, pero las normas sociales en Estados Unidos están más jodidas de lo que parece.
Además, nuestra educación es muy mala en comparación con algunos lugares que he estado.
Ahora vienen los payasos de "entonces deberías irte".
Fui a Nicaragua y la vida fue mucho más relajada, sin prisa en las cosas, centrada en la familia y en disfrutar de la vida.
Antes soñaba con vivir en un rascacielos del centro de Miami y conducir un Tesla. Caminar desde mi residencia segura a través de los barrios pobres todos los días y ver lo duro que la gente trabaja en Nicaragua para ganar centavos me hizo darme cuenta de lo importante que es cada dólar que ganamos, nosotros como estadounidenses desperdiciamos el dinero en muchas cosas que no son importantes en el gran esquema de las cosas.
También fue una locura ver cómo ir a un médico/hospital privado sin seguro era más barato que ir a un hospital americano con seguro.
Viajé bastante bien. Estudié medicina veterinaria en Alemania. He estado en París: aburrido, horrible, sucio, con carteristas y la policía no ayudó, pero tuve que atrapar a la chica yo mismo, aunque las panaderías son absolutamente fantásticas. He estado en Inglaterra, encantadora, pero la cultura de la bebida es otra cosa. Los Estados Unidos son ruidosos y furiosos y están llenos de comida procesada. Ir a una carnicería o a una panadería es encantador en muchas partes del mundo, pero ¿en Estados Unidos? El lema podría ser "fresco" o "congelado". Las verduras son horribles. Come un tomate italiano y no volverás a tocar otro. Hasta ahora, tener acento americano es una grave desventaja. Parece que la gente se pone automáticamente en guardia por si voy a ser grosero.
He estado en México, Alemania, Kuwait y Afganistán. Toda la gente que conocí eran personas maravillosas, ocupándose de sus propios asuntos y tratando de vivir sus vidas. Todos eran amables, estaban dispuestos y deseosos de mostrarme su cultura y compartir la comida. Todos compartimos las similitudes entre nuestros países y las diferencias, y nadie se ofendió nunca. La política era lo último de lo que hablábamos y, si se sacaba el tema, me decían cosas de sus países que no les gustaban
