Hay dos maneras de tomarse el hecho de que te parezcas a un famoso. Una es decirle sin más a la gente que o eres Tom Cruise y que no hace falta que saquen el móvil para hacerse la foto contigo. Así quedan decepcionados. Pero también puedes aceptar tu aspecto y seguirle el rollo a esa persona que se te acerca con cara de alucine y empieza a decirte lo bien que sales aquí o allí. Esto es más divertido.
Las personas de aquí debajo (algunos son famosos de verdad) decidieron usar este segundo método y le alegraron el día a mucha gente que creyó conocer a sus héroes. Mira tú también, a ver si te confunde su aspecto o no.
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