Bonnie Rodríguez Krzywicki intenta mostrar a la gente que ser fotogénico está al alcance de todos. Y se le da muy bien. Bonnie comparte consejos sencillos, explicando cómo parecer más cómodos ante la cámara en su Instagram. Ya lleva un tiempo haciéndolo y ha conseguido 621000 seguidores.
Presenta los consejos mostrando lo que hay y lo que no hay que hacer, de modo que resalta la gran diferencia de los cambios sutiles del lenguaje corporal y lo que consigue el uso de accesorios. Hay una gran variedad de localizaciones y circunstancias, así que todo el mundo puede aplicarlas, desde fotos en la playa a sesiones nocturnas.
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Foto uno: Piernas encogidas y cerca del cuerpo, efecto poco favorecedor.
Foto 2: parezco más esbelta y con más confianza. Al extender piernas y brazos, resulta más elegante
Cuando te hacen fotos, tienes una voz negativa en la cabeza. Da igual que sean en una calle concurrida o en mitad de la nada. Te preocupa lo que piense la gente, pero es tu foto. Ignora al resto del mundo y diviértete para acallar esa voz.
Evita cubrir el cuerpo. El lenguaje corporal parece inseguro. Crea un triángulo doble y eleva el torso para un look más potente.
Una de las metas de la cámara es mostrar curvas para que la foto sea más atractiva y dinámica
Poner el codo de frente causa distorsión en el aspecto. Si lo pones de lado, creas un triángulo que mejora la composición.
Si no estás totalmente cómodo frente a la cámara, generamos presión en los brazos, bien pegándolos al cuerpo o poniéndolos de forma incómoda. Si te relajas, quitas la presión y apareces mejor frente a la cámara.
Toca lo que te rodea, en este caso la barandilla. Para crear más curvas, exagera un poco con la espalda.
Esto se llama la pose Bambi. No es cómoda. Añade detalles para darle mayor look de verano.
Si te sientes hinchada, evita las fotos de frente. Si te pones de lado, pareces menos hinchada y creas líneas
