Desde el momento en el que venimos al mundo, ocurren cosas a nuestro alrededor que a veces pueden ser maravillosas, pero en otras ocasiones nos vuelven locos o nos dejan completamente confundidos. Ya saben, así es la vida. Si se encuentran en medio de una situación que los ha dejado con más preguntas que respuestas, pedir un consejo está bien.
¿Sabían que dar buenos consejos es un arte (o una ciencia) como cualquier otro trabajo? No solo se trata de saber cosas, sino también de ser capaces de encontrar las palabras justas. Pero, por otro lado, incluso cuando recibimos el mejor consejo posible, eso no significa que automáticamente estemos obligados a seguirlo.
No importa cuánta experiencia tenga la persona que nos dio el consejo o cuánto nos conozcan: si lo que sea que nos hayan dicho no nos parece bien, entonces probablemente sea mejor seguir nuestros instintos. Y no me hagan hablar sobre la gente que se cree autorizada a compartir su sabiduría de vida “porque sí”, aun cuando las palabras “necesito un consejo” jamás hayan salido de nuestras bocas.
Los consejos no siempre tienen que ser serios ni cambiar nuestras vidas. A veces, los consejos graciosos sobre situaciones al azar son lo mejor que podríamos recibir. Existen muchas situaciones inesperadas en la vida y hay consejos que no solo nos hacen reír, sino que también resultan útiles.
Para este artículo, hemos recopilado varios divertidos consejos de vida para todo tipo de situaciones. ¿Cuál les resultó más útil? Si tienen alguno que quieran añadir a esta colección, compártanlo con nosotros en los comentarios.
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Si encuentras un retrete en tus sueños, no lo uses.
Si alguna vez te atrapan durmiendo en el trabajo, levanta tu cabeza lentamente y di: “En el nombre de Jesús, amén”.
Si quieres molestar a alguien en el trabajo, haz comillas en el aire cuando nombres su cargo.
Si no sabes en qué sitio de la casa están tus hijos, apaga internet y espera a que mágicamente aparezcan.
Una vez, mi padre me dijo: “Hijo, si quieres que la gente preste atención a lo que tienes para decir, di que es algo que te dijo tu padre”.
Escucha música realmente mala cuando atravieses algo terrible en tu vida. Si escuchas música que amas, siempre te recordará esas épocas malas.
No les grites a tus hijos. En cambio, acércate a ellos y susúrrales; eso es mucho más aterrador.
Si, de repente, tus hijos comienzan a llevarse bien y son amables entre sí sin ninguna razón, sospecha mucho de ellos.
Siempre que estoy a punto de hacer algo, pienso: “¿Lo haría un idiota?”. Si la respuesta es sí, entonces no lo hago.
Si intentas robar un banco, no tendrás que preocuparte por el alquiler o las cuentas durante los próximos 10 años, tanto si tienes éxito como si no.
La mejor defensa frente a alguien que te filma es hacer sonar una canción de un artista que se tome muy en serio las infracciones a los derechos de autor.
Si oyes ruidos raros a la noche, entonces haz ruidos más extraños para afirmar tu posición dominante.
Si la vida te da limones, coloca su jugo en una pistola de agua y dispara en los ojos de los demás.
Si nadie viene del futuro para detenerte antes de hacer algo, entonces, ¿qué tan mala puede ser esa decisión?
Si esperas hasta el último minuto para hacer las cosas, solo te llevará un minuto completarlas.
Si le enseñas a pescar a un hombre, lo alimentarás por un día. Si se lo entregas a los peces para que se lo coman, él jamás volverá a estar hambriento.
Cásate con alguien cuyo cereal favorito sea diferente al que te gusta a ti y así no se comerá el tuyo.
Lleva un tenedor contigo. Si alguien intenta robarte, saca el tenedor del bolsillo, di: “Gracias, Dios, por el plato que estoy a punto de comer”, y persigue al ladrón con él.
Eeeh, no creo que sería lo mismo si el ladrón tuviese una pistola
Si nadas junto a un amigo, las posibilidades de que te coma un tiburón se reducen en un 50%.