19 Personas que sobrevivieron tras caerles un rayo muestran lo que causa en tu piel
Las probabilidades de que te caiga un rayo son 1 entre 300.000. Y aunque el 90% de personas sobreviven, la descarga eléctrica deja unas cicatrices en el cuerpo que casi parecen tatuajes, y se llaman figuras de Lichtenberg. Pero eso no es todo.
Un rayo puede calentar el aire que lo rodea a 27.760 grados Celsius, 5 veces más caliente que el sol, y puede contener hasta 1 billón de voltios de electricidad. Es terrorífico imaginar lo que esta cantidad de energía puede hacer a un humano.
Cuando entra en tu cuerpo, cortocircuita las pequeñas señales eléctricas que hacen que funcione el corazón, los pulmones y el sistema nervioso. Esto puede provocar un ateque al corazón, convulsiones, lesiones cerebrales, lesiones en la médula espinal y amnesia. El terrible calor, la luz y la electricidad también pueden dañar tus ojos, por ejemplo, agujereando tus retinas, y causando cataratas. Y por desgracia para los hombres, también puede producir impotencia y un descenso de la líbido en general.
Mientras el rayo se mueve por la superficie del cuerpo, puede forzar a salir a los glóbulos rojos de los capilares a la epidermis, como un moratón. Estas cicatrices son las llamadas figuras de Lichtenberg. Las altas temperaturas también pueden calentar cualquier metal que lleves encima, causando quemaduras de 3º grado. O también vaporizan el sudor o la lluvia sobre tu piel. A veces, esta explosión de vapor destroza la ropa y calzado de la gente, dejándoles casi desnudos. Aquí debajo te presentamos a algunas personas que han sobrevivido a esta experiencia.
(via: allthatisinteresting, businessinsider)
Las probabilidades de que te caiga un rayo son 1 entre 300.000
Image credits: unknown
Y aunque el 90% de personas sobreviven, la descarga eléctrica deja unas cicatrices en el cuerpo que casi parecen tatuajes
Image credits: unknown
Se llaman figuras de Lichtenberg
Image credits: whampbeef
Un rayo puede calentar el aire que lo rodea a 27.760 grados Celsius
Image credits: unknown
5 veces más caliente que el sol
Image credits: unknown
También puede contener hasta 1 billón de voltios de electricidad
Image credits: unknown
Cuando esta cantidad de energía entra en tu cuerpo, cortocircuita las pequeñas señales eléctricas que hacen que funcione el corazón, los pulmones y el sistema nervioso
Image credits: unknown
Esto puede provocar un ateque al corazón, convulsiones, lesiones cerebrales, lesiones en la médula espinal y amnesia
Image credits: nejm
El terrible calor, la luz y la electricidad también pueden dañar tus ojos
Image credits: unknown
Por ejemplo, agujereando tus retinas, y causando cataratas
Image credits: unknown
Y por desgracia para los hombres, también puede producir impotencia y un descenso de la líbido en general
Image credits: CBS
Mientras el rayo se mueve por la superficie del cuerpo, puede forzar a salir a los glóbulos rojos de los capilares a la epidermis, como un moratón
Image credits: unknown
Estas cicatrices son las llamadas figuras de Lichtenberg
Image credits: unknown
A un hombre llamado Winston Kemp le cayó un rayo en 2011
Image credits: nejm
Irónicamente, el hombre es electricista
Image credits: sciencegeekgirl
«Salí a salvar mis calabazas. Después de eso, estaba volviendo adentro»
Image credits: geardiary
«Sé que cayó en el patio del vecino, y fue brillante y muy ruidoso. No sentí nada»
Image credits: geardiary
«Volví dentro como si no pasara nada. Umm… me dolía el brazo. Eso fue quizá una hora antes de que viera las marcas»
Image credits: geardiary
«Horas después de que ocurriera empezó a molestarme bastante. El día siguiente lo pasé mal. Empezaron a formarse las ampollas, eran enormes» Y siguieron creciendo durante toda una semana
Image credits: geardiary
En EEUU caen rayos 25 millones de veces al año
Image credits: Kansas City Golf
Y las figuras de Lichtenberg también pueden aparecer en campos de hierba
Image credits: Anna Garcia
Así que los campos de golf son sitios donde ocurren a menudo
Image credits: beingto
Llevan el nombre del físico alemán Georg Christoph Lichtenberg, que fue quien las descubrió y estudió
Image credits: Anna Garcia
17
0