Esta tiktoker española cuenta diferencias chocantes que encontró tras irse a vivir a Australia

Marta, de 31 años, tiene una serie de videos en donde habla sobre cosas que la han sorprendido de Australia y sus habitantes. En una de sus últimas publicaciones, comparte un dato curioso: en algunas paradas de autobús en Sídney ¡se puede cargar el celular sin necesidad de tener a mano el cable del cargador! En el clip de TikTok, la joven enseña que los bancos de la parada tienen instalados cargadores inalámbricos, ideal para sacar a cualquiera de un apuro. Marta comentó que incluso hubo veces que dejó pasar el bus para que su teléfono tenga batería. Así que ya saben, si su teléfono está en las últimas y se encuentran de paseo por allí, esperar el bus los puede salvar.

Gracias a otros videos podemos seguir aprendiendo datos de la vida de los australianos que asombraron a Marta. En una ocasión, se encontraba viajando en autobús cuando notó que algunos pasajeros estaban mojados, pues volvían de una sesión de surf; además, iban descalzos. ¿En sus países esto es algo en común?

En otra oportunidad, fue de compras al supermercado. Le llamaron la atención los canastos de frutas gratis para los niños, la sección de los productos que están cerca de caducar a mitad de precio y el descuento en las frutas y verduras que parezcan menos agradables a la vista. Además, comentó que los australianos comen carne de canguro y las bebidas alcohólicas se compran exclusivamente en otra tienda cercana al supermercado. Aquí también la gente se siente cómoda andando descalza. Este es uno de sus videos más populares; actualmente cuenta con más de 500.000 vistas.

Después de viajar por Latinoamérica durante 7 meses y haber pasado por otros países, decidió ir a Australia. Marta estuvo allí hace 7 años y su espíritu aventurero la llevó de vuelta. Luego de que la empresa para la que trabajaba en España cerrara, la vida de oficina —y el estrés que conlleva— dejó de interesarle. Hoy en día, sus trabajos casuales y las vistas que ofrece el país oceánico son más atractivos para ella. Comentó que la plata que gana en Australia la está ahorrando para destinarla en viajes y que sueña con tener, en algún momento, una casa con vista al mar.

En cuanto a Latinoamérica, algunos latinos que han decidido emigrar a Australia han compartido sus experiencias de choque cultural en la web. Una de las diferencias culturales que más suelen notar es el menor contacto físico entre las personas: la usuaria Andrea Bermudez, que vive en Sidney desde 2013, cuenta “Muchos australianos no se dan beso al saludarse, se dan abrazos y solo si se tienen confianza. De lo contrario solo se dan la mano”. Otros usuarios destacan la limpieza de las ciudades: ¡es tan asombrosa que incluso algunas personas caminan descalzas por la calle! 

Por otro lado, el colombiano de familia australiana Daniel Bishop, que se mudó a la capital, Canberra, en 2005, cuenta que la gente es amigable —aunque al principio pueda parecer un poco distante— y respetuosa de las diferencias culturales y personales. El joven también resalta el nivel de organización de las ciudades, y la tranquilidad y seguridad con la que se vive, además de las buenas oportunidades laborales y condiciones de trabajo. 

¿Qué les parecieron estas diferencias culturales, Pandas? ¿Han estado alguna vez en Australia? ¡Compártannos sus experiencias en los comentarios! Y, si desean ver más contenido de choques culturales, échenles un vistazo a estos artículos anteriores de Bored Panda aquí, aquí y aquí.