El psicólogo Dr. Christopher Peterson, autor de Pursuing the Good Life, dice que una lista de deseos puede ayudar a establecer metas, pero el inconveniente es que también implica un enfoque de "marcar casillas" en nuestro tiempo en la Tierra, lo que puede llevar a una sensación superficial de realización y distraernos de experiencias más profundas y significativas.
Así que echemos un vistazo a una lista de deseos que no se debe completar. Una antilista de deseos, por así decirlo. Hace unos días, el usuario de Reddit TheDeadYeti hizo una publicación en la plataforma, invitando a todos a compartir las cosas que han intentado y se han comprometido a no volver a hacer. Desde perseguir la popularidad hasta alojarse en albergues, aquí están las entradas más votadas en la discusión.
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Un crucero. Comida mediocre, bebidas diluidas en agua, claustrofobia en el barco, contribuir a una pesadilla ecológica, hacinados en un barco con cientos, si no miles, de otras personas, excursiones estresantes que no son óptimas... una pesadilla en general y tan cara que no deseo repetir jamás.
Salir con un hombre que siga a Andrew Tate y sus camaradas en la misoginia. La coalición y la ideología por los derechos de los hombres es un problema para todos los géneros.
Salir con una mujer que dice que te ama después de 4 días de relación. A cualquier chico o chica que lea esto, por favor, úsalo como advertencia. Lo único que saldrá de una relación así son problemas.
Ir a Las Vegas. La desconexión entre las luces y la ostentación y los pobres y los mendigos pidiendo era inquietante. Además, allí hace demasiado calor para mí.
Comprar una propiedad en un lugar con una asociación de propietarios... si vuelvo a hacerlo, que alguien me dé una patada. Fuerte. No sería tan malo si no fueran tan imbéciles.
Beber. Sinceramente, la vida es más divertida sin el alcohol de por medio, y deja de ser divertida a medida que uno envejece.
Nadar en el Mar Muerto. No lo hagas, amigo, no vale la pena correr el riesgo de que entre DEMASIADA SAL en cualquier orificio de tu cuerpo. ¿Te rascaste el brazo muy fuerte? SAL. ¿Parpadeaste por la humedad del aire? SAL. ¿Abres las piernas siendo mujer? ADIVINA, ADIVINA. Ah, y aquí viene la parte divertida, una vez que tus tiernos orificios corporales empiecen a arder como el fuego del infierno por la SAL, empezarás a agitarte porque AAAAAA SÁCALA, SÁCALA, SÁCALA. Y eso salpicará agua por todas partes, haciendo que más orificios corporales se contaminen con SAL. Para cuando llegues a la orilla, todo estará en llamas dentro de tí y llevará mucho, mucho tiempo lavar toda esa SAL.
El Mar Muerto: no lo pruebes ni una sola vez.
Poliamor. Apenas me adentré en aquello y me quemé bastante. No me interesa volver a intentarlo.
Vivir con alguien. ¿Perros, gatos, reptiles, roedores? Claro que sí. Todo bien. ¿Un ser humano? No, j*der, gracias.
Asistir a un evento multitudinario. Estuve en la toma de posesión de Obama en 2008. Hacía un frío glacial y mucha gente no estaba preparada para eso. Yo sí, pero no estaba preparada para la realidad de que 2,5 millones de personas invadieran una ciudad con una población de 600.000 habitantes. Sin comida, sin agua, sin baños, sin refugio, sin espacio para moverse, sin ningún lugar donde sentarse después de horas y horas de estar de pie y caminando. Había basura por todas partes, las estaciones de metro eran una pesadilla para los claustrofóbicos, la gente se desmayaba por deshidratación. Terminé caminando más de 6,5 kilómetros por el Potomac hasta Virginia para coger un tren a casa. Terminó siendo un día agotador de 12 horas. Está bien decir que estuve allí, pero nunca volveré a meterme en una multitud de ese tamaño.
Festivales de música al aire libre en los que se acampa. Mi marido y yo fuimos a Sweetwater en Atlanta hace dos años y me arruinó otros festivales. Pudimos ir a ver música todo el día, luego volver al hotel, ducharnos y DORMIR al final del día. No me di cuenta de lo vieja que me había vuelto hasta que juré que nunca más volvería a dormir en el suelo, en el barro, dentro de una tienda de campaña.
Adoptar un cachorro. Amo a este pequeño demonio, pero no volveré a hacerlo. Adoptaré un chucho perezoso de siete años.
Una vez intenté impresionar a una cita pidiendo el plato más picante del menú. Nunca más fingiré que mis papilas gustativas pueden tolerar lo que claramente no pueden. Lección aprendida: ¡los chiles fantasma no sustituyen la personalidad!
Quedarme embarazada. El parto no es tan malo, puedo hacerlo. Los 9 meses anteriores y los 4 años posteriores no los volveré a hacer ni por amor ni por dinero.
Jajajsjajsj, siempre recuerdo cuando tuve a mi primera hija, un parto duro y largo, cuando terminé me dijo una amiga: ahora empieza lo realmente jodido, criarla. Pero mira, tan malo no es que tuve otra.
¡Hostales! Me alegro mucho de que existan como opciones económicas para jóvenes, tal como yo los experimenté, pero ahora estoy feliz de cerrar ese capítulo de mi vida jajaja. ¡La privacidad adicional, la limpieza adicional y la comodidad adicional ahora valen mucho más la pena para mí y, afortunadamente, puedo permitírmelo!
Nunca más me casaré en mi vida. Si mi marido y yo nos divorciáramos, estoy segura de que seguiría soltera. No pienso divorciarme de él, pero si lo hiciera, no quiero volver a intentarlo. Una vez y listo. Si no funciona con él, no me molestaré en volver a intentarlo.
Yo también la entiendo, sólo pensar en volver a pasar por eso, espero quedarme con mi marido para siempre, pero no me veo conociendo a nadie otra vez con vistas a convivir y todo eso. Qué pereza.
Correr una maratón. Fue lo peor.
Es lo más hermoso que hice y continuaré haciendo, hasta que el cuerpo y la edad digan basta.
Si quieres seguir leyendo sobre otras cosas que la gente no quiere probar en su vida, puedes hacerlo aquí.
