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20 Personas que dijeron algo tan profundo, que le cambiaron literalmente la vida a alguien
Se dice que "la pluma es más fuerte que la espada", y eso demuestra el verdadero poder de las palabras. Aunque hay muchas formas de influir e inspirar a alguien, pocas son más efectivas que una buena anécdota o un consejo.
Aquí hemos recopilado una lista de ocasiones en que las palabras fueron tan elocuentes que cambiaron vidas, literalmente. Estos pedacitos de sabiduría dieron en la diana, y estamos seguros de que algunos te inspirarán a ti también. Aquí debajo puedes verlo por tí mismo. ¡Vota por tus favoritos!
(Imagen de portada de Facebook: whatleydude)
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Estaba intentando enseñar a bucear en la piscina pública a mi hermana de 6 años, pero ella tenía mucho miedo. Cerca, había una anciana de unos 75 años nadando lentamente, y nos miraba de vez en cuando. Cuando mi hermana dijo "¡Pero tengo miedo, me da mucho miedo!", y la anciana se acercó y le djo: "¡Pues ten miedo! ¡Pero hazlo de todas formas!"
Eso fue hace 35 años y nunca lo he olvidado. No se trata de no tener miedo, sino de tenerlo y hacer las cosas igualmente.
"No seas un capullo con tu perro. Él estará solo unos pocos años de tu vida, pero él estará toda su vida contigo."
Una vez, le preguntaron a un hombre en silla de ruedas si era difícil estar confinado en ella. Él respondió: "No estoy confinado en mi silla de ruedas, es mi liberación. Si no fuese por ella, tendría que estar siempre en la cama y no podría salir de mi cuarto o de mi casa." Buena perspectiva.
"Piensa en una vez que hiciste el ridículo. Fácil, ¿no? Ahora piensa en una vez que otra persona hizo el ridículo. ¿A que es más difícil?" Ya no me preocupo tanto si hago el ridículo, porque nadie se acuerda excepto yo.
"Todas las personas que conozcas sabe algo que tú no sabes." Mi abuelo me dijo esto y me recuerda que estoy rodeado de profesores.
"La educación es cara, pero la falta de educación sale más cara todavía." Esto me hizo tomarme los estudios mucho más en serio.
"La depresión se presenta a sí misma difrazada de pensamientos racionales." Me lo dijo mi tío.
Mi madre se estaba muriendo. Una amiga me dijo "tienes toda la vida para llorar por esto, no lo hagas delante de ella."
Me ayudó a entender que mis sentimientos no son siempre lo importante. Se puede dejar el llanto para más tarde, y esta habilidad me ha sido útil muchísimas veces.
Cuando era joven, en mi primera relación seria, estaba hablando con mi pareja y le dije que solo quería encontrar a la persona adecuada. Ella me dijo que "todo el mundo está buscando a la persona adecuada, pero nadie intenta ser la persona adecuada."
"He aprendido a dar... no porque tenga demasiado. Si no porque sé lo que se siente cuando no se tiene nada."
Llevaba un mal día y dije: "¿Por qué yo?" y entonces un compañero de trabajo me respondió: "¿Y por qué no?". Tenía razón, así que me callé y lo superé.
"La persona con la que vas a pasar más tiempo en tu vida eres tú mismo, así que intenta ser lo más interesante posible."
"Sabes que eres adulto cuando puedes llevar razón sin demostrar que la otra persona está equivocada."
"Tu trabajo nunca te amará." Me hizo reconsiderar seriamente el involucrarme emocionalmente en ello.
"Juzgamos a los demás por sus acciones y a nosotros mismos por nuestras intenciones." Me hizo pensar mucho sobre la gente.
"¿Preferirías despertarte dentro de 20 años preguntándote qué te has perdido o despertarte dentro de 20 años sabiendo exactamente lo que te has perdido?" Después de esto, nunca volví a tener problemas de compromiso.