Slavik, El Indigente Ucranio De 55 Años Que Siempre Va A La Moda

No necesitas ser rico para hacerte famoso: los indigentes, a pesar de las muchas dificultades a las que se enfrentan, pueden convertirse en personalidades reconocidas y bienvenidas en sus vecindades y ciudades. Slavik es un indigente de 55 años que vive en Lviv, Ucrania, se ha convertido en toda una personalidad por su sentido de la moda y el estilo.

Slavik fue descubierto por Yurko Dyachyshyn, un fotógrafo ucranio que empezó a hacer fotos de Slavik después de encontrárselo casualmente, y creó una serie con 100 imágenes llamada «La moda de Slavik». Para más información, sigue leyendo los textos entre las fotos.

Más información en: dyachyshyn.com (via: mymodernmet, featureshot)

«Slavik tiene 55 años. Es un gitano indigente, pero no una persona ordinaria. Su modo de vida es totalmente distinto al de otros indigentes. No va por ahí con muchas bolsas, ni se dedica a rebuscar en la basura,» escribe el fotógrafo Yurko Dyachyshyn, que se hizo amigo de Slavik.

«Slavik casi nunca lleva la misma ropa, cosa muy extraña en un indigente. Además de cambiar de modelo todos los días (hasta dos veces al día) también cambia su peinado y su afeitado regularmente, y se depila las axilas.»

«¿Cómo es esto posible para un indigente? Tiene un escondite y nadie sabe dónde está. Mantiene su hogar en secreto.»

«Slavik vagabundea por las calles y pide monedas, pero no molesta a la gente. Bebe alcohol regularmente, sobre todo cerveza, pero no es un alcohólico. Slavik es el indigente con más estilo del mundo.»

«Todas las fotos (unos 100 retratos diferentes) las hice durante encuentros ocasionales a lo largo de un par de años,» cuenta el fotógrafo para mymodernmet. «Podía encontrarme con Slavik cada día, o cada pocas semanas o meses. Luego se acostumbró a mí, entonces empezó a buscarme sabiendo por dónde andaba, o si yo tenía tiempo libre iba a lugares donde era muy probable que nos cruzáramos. De otra manera, era imposible llegar a un acuerdo con él.»

«Lo más importante es no perder la salud, y es esencial que nadie arruine o interfiera en la paz interior de otra persona,» dice el fotógrafo citando a Slavik.

Por desgracia, Dyachyshyn no sabe nada del paradero de Slavik desde enero de 2013.

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